La historia nos ha contado la eterna rivalidad entre Estados Unidos y la Unión Soviética. Sin esa rivalidad, prácticamente no existirían la mitad de las películas de acción de Hollywood y, tal vez, el hombre se hubiera tardado más en conquistar espacio y llegar a la Luna.
Recordemos que la Unión Soviética se regía bajo el ideal del socialismo, por lo que todo lo que oliera a capitalismo era eliminado o tratado de superar. La industria automotriz no quedaba exenta de estos conflictos. Un ejemplo de ello fue el automóvil fabricado por GAZ, llamado GAZ GL-1.
La anécdota alrededor de este vehículo resulta interesante. En 1938 se llevó a cabo una carrera en Moscú en la que participó Mikhail Grumov con un Cord 812, un automóvil estadounidense que rompió la marca de velocidad de aquella nación con 141,56 km/h, lo cual era imperdonable. Por ello, el gobierno stalinista, además de prohibir las competencias extranjeras, puso en marcha el proyecto GL-1.
El proyecto, encargado por el gobierno a la empresa GAZ, estuvo listo en pocas semanas. El ingeniero a cargo fue Evgenie Agitov, quien, junto a su equipo, hizo lo posible para dar vida a un nuevo deportivo en la fábrica de Gorki.
GAZ diseñó el nuevo vehículo en base a su modelo M1, que a su vez estaba inspirado en un Ford Modelo B V8 de 1933. El resultado del rediseño fue un monoplaza roadster de 1000 kg de peso con un motor de 4 cilindros y 3.3 litros que producía 50 hp. Con estas características no se esperaba romper un nuevo récord, así que se aumentó la compresión y se añadieron válvulas de mayor tamaño al motor, lo que incrementó el poder a 65 hp.
GL-1 1938
La prueba de fuego llegó en octubre de 1938, cuando se realizaron las primeras pruebas. En esas prácticas, el monoplaza, conducido por Arkady Nikolaev, alcanzó 147,84 km/h, logrando romper el récord soviético -obtenido con el Cord 812-.
En 1940, el nuevo modelo GAZ-11-73 con 6 cilindros obligó a una renovación del GL-1. El rediseño afectó tanto a la mecánica como su aerodinámica. Se modificó la carrocería con una cúpula aerodinámica que le otorgaba un aspecto futurista, las llantas se cubrieron y se le añadió una nueva parrilla. Al final, todos estos nuevos aditamentos aumentaron el peso del automóvil a 1,100 kg. Las mejoras en el motor incluyeron un aumento de su potencia a 100 hp, por lo que el 22 de septiembre de 1940, en las pruebas, alcanzó una velocidad de 161,90 km/h, rompiendo el récord impuesto por la primera generación del GL-1.
GL-1 1940
La Segunda Guerra Mundial interrumpió la continuación de una tercera generación del GL-1 y ambos prototipos fueron destruidos. En 2010, Boushuev Coachbuild construyó una réplica exacta que ahora se exhibe en el Museo de GAZ.
¿Sabías del récord soviético de velocidad?
Replica 2010