El Lamborghini Urus hizo su aparición en 2017 como sucesor del Lamborghini LM 002 de 1986 y, aunque se pensaría que fueron los primeros intentos de la marca en diseñar un todoterreno, la verdad es que llevaban desde los años 70 desarrollando el proyecto; el concepto se llamó Cheetah.
Después de varios años de bonanza, Lambo se encontraba en una de sus más grandes crisis por ahí de los años 70. La crisis del petróleo y la renuncia de Ferruccio Lamborghini tenían a la marca al borde del abismo.
Los nuevos propietarios buscaban a toda costa salvar la compañía. Buscaron nuevos proyectos para sobrellevar la crisis, y entonces se aliaron con el ejército estadounidense, que por encargo de Mobility Technology International (MIT), creó un vehículo militar 4x4 para sus tropas.
El proyecto era lucrativo y prometedor, pero como se comentó, Lamborghini no tenía solvencia económica, por lo que pidió un préstamo al gobierno italiano. Aunque todo parecía que iba a ir de maravilla, resultó todo lo contrario, porque el MIT había copiado el diseño de uno de los candidatos previos, el FMC XR311, y eso sin que Lamborghini lo supiera.
El resultado fue un vehículo híbrido entre pickup y buggy musculoso, con motor Chrysler V8 de 5.9 litros impermeabilizado, conectado a una transmisión automática de tres velocidades y montado en la parte trasera. Sin embargo, su desempeño fue desastroso: en primer lugar, porque la transmisión no era adecuada para la distribución del peso; y en segundo, porque su motor de dos toneladas solo ofrecía 180 CV.
Aun con todos los desperfectos, fue presentado en 1977 en el Salón de Ginebra, ya que se planeaba una versión de calle. Pero… ¿se acuerdan que el diseño era “copiado”? Bueno, pues eso le trajo a Lamborghini muchos problemas legales. Las cosas no mejoraron, a la par del desarrollo del Cheetah, Lamborghini tenía un contrato con BMW para realizar el chasis del superdeportivo M1, pero todos los recursos ya se habían destinado al Cheetah, lo cual derivó en la cancelación del contrato con BMW.
Y si eso no fuera suficiente, el Cheetah chocó durante las pruebas militares y se destruyó… aunque nuevos descubrimientos apuntan a que tal vez eso realmente no sucedió y que el prototipo sigue intacto. Al final, tras las duras pruebas, el ejército estadounidense decidió elegir una marca nacional para la producción de sus vehículos y contrató a AM General y su modelo Humvee ( Hummer).
Lamborghini no pudo enfrentar las deudas y, en 1978, se declaró en bancarrota. A principios de los 80, los hermanos Jean‑Claude y Patrick Mimran compraron la marca, la rescataron y retomaron la idea del todoterreno con el prototipo LM001 y, después, con el conocido Lamborghini LM002.
Lamborghini LM002